Dak Prescott reconoció este jueves que debe llevar a los Dallas Cowboys a la conquista del Super Bowl y asumió públicamente la urgencia de cumplir con ese objetivo personal y profesional.
“Quiero ganar un campeonato, y ya todo lo que venga después sobre mi legado aquí, cuando deje de jugar, se cuidará solo”, dijo el mariscal de campo al finalizar el entrenamiento del equipo, en medio de la expectativa por su liderazgo y desempeño.
Prescott, de 31 años, fue reclutado en la cuarta ronda del Draft 2016 y ha desarrollado toda su carrera en los Cowboys. Ha sido seleccionado 3 veces al Pro Bowl, pero no ha conseguido llevar al equipo a una final de Conferencia Nacional ni al Super Bowl. Con un salario anual de 61.6 mdd, es el jugador mejor pagado de la NFL y también uno de los más cuestionados. “Quiero ganar un Super Bowl por mi bienestar personal, por mi cordura. Tengo que mantenerme firme en ese objetivo”, expresó.
El mariscal también habló del nuevo receptor George Pickens, proveniente de Pittsburgh Steelers, a quien aconsejó mantener el enfoque ante la presión. “Le he dicho que no debe escuchar nunca lo que dicen afuera. George es fenomenal. Es un chico que ama el fútbol y quiere mucho a sus compañeros”, declaró Prescott. Pickens se integrará a un cuerpo de receptores encabezado por CeeDee Lamb, como parte del ataque aéreo que buscará superar el desempeño del año pasado, cuando Dallas terminó con marca de 7-11, sin alcanzar los playoffs.
Los Cowboys iniciarán la pretemporada el 9 de agosto frente a Los Angeles Rams. Después se enfrentarán a los Baltimore Ravens el 16 de agosto y cerrarán contra Atlanta Falcons el 22. El arranque oficial de la temporada será el 4 de septiembre ante los campeones Philadelphia Eagles.