La celebración por el histórico triunfo del París Saint-Germain (PSG) en la Liga de Campeones convirtió las calles de París en un escenario de fiesta, pero también de violencia, luego de que se registraran disturbios en varios puntos de la ciudad.
Durante la noche del sábado, miles de aficionados se concentraron en la Avenida de los Campos Elíseos, donde algunos grupos protagonizaron actos violentos que obligaron a las fuerzas del orden a intervenir con gases lacrimógenos y cañones de agua. Para las primeras horas del domingo, la Prefectura de Policía de París reportó un saldo provisional de 131 personas detenidas.
Uno de los focos principales fue el entorno del Arco del Triunfo, donde encapuchados derribaron barreras de seguridad, lanzaron fuegos artificiales y proyectiles, y provocaron enfrentamientos con la policía. En respuesta, las autoridades desplegaron 4,500 agentes en la capital y zonas aledañas para contener los disturbios.
En la Puerta de Saint Cloud, cerca del Parque de los Príncipes, también se reportaron incidentes, incluidos el incendio de dos automóviles, daños a autobuses, y destrozos en mobiliario urbano como papeleras y marquesinas. La policía reportó nueve detenidos en el Periférico de París, luego de que un grupo con bengalas intentó bloquear la circulación.
Los disturbios afectaron incluso comercios de la zona, como una tienda de calzado deportivo en los Campos Elíseos, donde un grupo ingresó por la fuerza, aunque fueron detenidos más de 30 individuos gracias a la rápida reacción de los cuerpos de seguridad.
No obstante, en otras zonas como las plazas de la República, Bastilla y la calle Princesse, miles de personas celebraron de forma pacífica, aunque con bengalas, gritos y bocinazos. Solo se evacuó una zona del bulevar de Saint Germain tras un pequeño incendio en el techo de un edificio ocasionado por artefactos pirotécnicos.
En total, el Ministerio del Interior reportó el despliegue de 5,400 agentes para prevenir actos de violencia tras la final de la Champions, una medida que responde a los incidentes previos tras la clasificación del PSG a la final.