Un cliente de Walmart en Campeche fue detenido tras intentar comprar una televisión Philips de 70 pulgadas que, según la etiqueta, tenía un precio de solo 547 pesos. Aunque el cliente logró pagar en caja, los empleados del establecimiento alegaron que el precio era un error del sistema.
Tras el pago, el cliente fue interceptado por personal de seguridad antes de salir de la tienda. El personal rompió el ticket de compra, lo acusó de intento de robo y fue esposado para posteriormente ser trasladado a la Fiscalía de Campeche.
El caso se viralizó rápidamente en redes sociales, donde los usuarios criticaron la actuación de Walmart y exigieron la intervención de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco). También se denunció que a menudo los empleados guardan productos en las bodegas para aprovechar las ofertas antes que los clientes.
Según la Ley Federal de Protección al Consumidor, las tiendas están obligadas a respetar el precio exhibido en sus productos. Por lo tanto, Profeco podría abrir una investigación para determinar las responsabilidades por lo ocurrido.