Un adolescente perpetró un ataque con arma blanca en una escuela en la localidad de Gorki-2, al oeste de Moscú, que resultó en la muerte de un niño de 10 años y dejó herido a un agente de seguridad, según confirmó el Comité de Instrucción de Rusia (CIR).
El atacante, un escolar de 15 años identificado como Timofei ‘N’, supuestamente armado con un puñal y un espray de gas lacrimógeno, atacó a sus víctimas e incluso, según reportes de prensa, se tomó una selfie junto al cadáver del alumno.
El agresor fue detenido por la policía y puesto a disposición para interrogatorio. El adolescente, que no cursaba en el centro atacado, se había acuartelado en un aula con un rehén, el cual fue liberado ileso.
Aunque el móvil del crimen se desconoce, en redes sociales se han difundido imágenes del joven con simbología nazi, y testigos señalan que llevaba consigo otras armas, incluyendo una bomba casera.
El gobernador Andréi Vorobiov y la defensora del niño han hecho un llamado a los medios para no difundir las imágenes sensibles del crimen.