A 15 años del homicidio de la activista social Marisela Escobedo Ortiz, este lunes se llevó a cabo un encendido de velas y un performance frente al Palacio de Gobierno, a escasos metros del lugar donde fue asesinada mientras exigía justicia.
Durante la intervención artística, las participantes formaron sobre la cinta asfáltica la frase “Marisela Vive”, al tiempo que se narró el largo y doloroso proceso que emprendió Escobedo Ortiz para buscar justicia por el feminicidio de su hija, Rubí Marisol Frayre, quien fue asesinada a los 16 años por su pareja, Sergio Rafael Barraza, en agosto de 2008.
A pesar de haber confesado el crimen, Barraza obtuvo su libertad, lo que evidenció graves fallas en el sistema de justicia y motivó la lucha incansable de Marisela Escobedo, convirtiéndola en un símbolo nacional de la exigencia contra la impunidad y la violencia feminicida.
Posteriormente, Sergio Rafael Barraza se integró al grupo criminal Los Zetas, organización caracterizada por su alto nivel de violencia y conformada en sus orígenes por exintegrantes de fuerzas especiales. En ese mismo grupo militaba José Enrique Jiménez Zavala, alias “El Wicked”, autor material del feminicidio de Marisela Escobedo, ocurrido el 16 de diciembre de 2010 frente a la sede del Poder Ejecutivo estatal.
Sergio Rafael Barraza murió el 16 de noviembre de 2012 durante un enfrentamiento con fuerzas militares en el estado de Zacatecas, mientras que José Enrique Jiménez Zavala falleció por asfixia en el Centro de Readaptación Social número 1 de Aquiles Serdán, el 6 de enero de 2015.
El acto conmemorativo reafirmó la memoria de Marisela Escobedo como un emblema de la lucha por justicia para las víctimas de feminicidio y como un recordatorio permanente de la deuda del Estado con las mujeres.